Cambios de Estado (fotografía)

fotografías de objetos

La obra propone una reflexión sobre la situación actual del mundo desde las nociones de paisaje y jardín. El paisaje, entendido como construcción cultural y el jardín como un recorte de éste, espacio idealizado, diseñado por el hombre.

En la obra, el paisaje se presenta en estado de enfermedad y en proceso de transformación, dejando abierta la posibilidad de devenir una nueva estructura, un “cambio de estado”.

El reconocimiento de las formas de un jardín y su composición material: hojas, plantas, ramas, macetas, esculturas como un cisne, fuente, gnomos, son llevados al fragmento y a la deconstrucción, como si se tratara de la ruina y arqueología de una civilización ahogada por el crecimiento de una naturaleza extraña e infectada, una plaga.

Los hechos producidos por una pandemia que pone en jaque al mundo, incluidas las grandes potencias y al propio sistema capitalista, agudiza la sensación social de inquietud, vulnerabilidad y precariedad que ya existían. La obra busca reflejar ese estado de crisis, incertidumbre e imprevisibilidad en el que se encuentra el mundo en la actualidad. 

El uso de materiales plásticos para la construcción de estas piezas amorfas, funciona como dispositivo para el desencanto y la desilusión, aquello que creíamos reconocer como naturaleza se transforma en extrañeza y en la evidencia de un artificio creado, una vez más, por el hombre. 

Esta obra funciona como objeto de reflexión ahora en plena pandemia, pero también para el futuro, cuando se restablezcan (o no) nuestras rutinas y nos pongamos a evaluar el impacto de extraordinaria coyuntura.